El lichi es la fruta que crece en un árbol con el mismo nombre, que puede alcanzar hasta 20 metros de altura. Reconocible entre mil gracias a su fina corteza rosada y rugosa, tiene una jugosa pulpa blanca que está deliciosamente perfumada. En el aspecto nutricional, el lichi está repleto de vitamina C antioxidante y potasio, esenciales para el funcionamiento del cuerpo. En la cocina, esta pequeña fruta sorprendente ofrece muchas posibilidades.
Características del lichi
- Excelente fuente de potasio y vitamina C;
- Poder antioxidante;
- Rica en agua;
- Olor característico;
- Buena fuente de fibra dietética.
Valores nutricionales y calóricos del lichi.
El lichi es una fruta muy interesante desde el punto de vista nutricional. Con 81 kcal por 100g, es una de las frutas moderadamente calóricas. Rica en agua, es hidratante y refrescante. Desde el punto de vista de los nutrientes, el lichi es una buena fuente de carbohidratos y proporciona a las células del cuerpo la energía disponible. El lichi también es una buena fuente de fibra dietética blanda que promueve el tránsito intestinal y tiene un efecto satietogénico que es particularmente buscado como parte de una dieta saludable.
Además, esta pequeña fruta única es una muy buena fuente de vitamina C antioxidante, potasio y magnesio. Por tanto, ayuda a luchar contra la oxidación celular responsable del envejecimiento prematuro de las células. Finalmente, los nutrientes del lichi promueven la salud cardiovascular y apoyan el sistema inmunológico.
Por 100 g (unos 10 lichis)
Contenido medio
Calorías
81 kcal
Agua
80,5 g
Carbohidratos
16,1 g
Proteína
1,13 g
Lípidos
0,4 g
Fibra dietética
2 g
Vitamina C
19,2 magnesio
Potasio
200 magnesio
Cobre
0,2 mg
Magnesio
18 magnesio
Los beneficios del lichi
Gracias a su riqueza en vitamina C y potasio, el lichi gana para ser conocido e integrado con mayor frecuencia en nuestra dieta. La vitamina C es un antioxidante y tiene un impacto positivo en la piel, el sistema inmunológico y la salud del cuerpo en general. El potasio, por otro lado, juega un papel esencial en los mecanismos de contracción muscular y transmisión nerviosa.
Rica en vitamina C
El lichi es una buena fuente de vitamina C. El requerimiento diario de un adulto varía entre 75 y 90 mg por día. Consumir 100 g de lichi puede cubrir del 80 al 95% de sus necesidades. Además de su papel como antioxidante y reductor del estrés oxidativo, la vitamina C contribuye al mantenimiento de la integridad de la piel, ayuda a la cicatrización de heridas, protege las células del envejecimiento prematuro causado por los radicales libres y facilita las funciones inmunológicas. Además, facilita la absorción de hierro no hemo de origen vegetal.
Fuente de potasio
El lichi también es una fuente de potasio. Al igual que el sodio, el potasio es un mineral esencial que realiza varias funciones necesarias en el cuerpo humano. Con la ayuda del sodio, ayuda a mantener el equilibrio ácido-base del cuerpo y controla el pH dentro de las células. También es fundamental para la transmisión de los impulsos nerviosos, para la contracción muscular.
También interviene en el buen funcionamiento de los riñones y las glándulas suprarrenales, así como en la síntesis de proteínas y el metabolismo de los carbohidratos. Además, una ingesta suficiente de potasio se asociaría con un riesgo reducido de enfermedad cardiovascular.
Unas palabras del nutricionista
Con su alto contenido de agua, el lichi es una fruta muy refrescante. Como la mayoría de las frutas, es muy baja en calorías y grasas, por lo que es un alimento de elección para una dieta saludable.
¿Cómo elegir los lichis adecuados?
El lichi es una fruta de un árbol llamado Litchi chinensis, una especie de árbol tropical originario del sur de China. Este árbol puede crecer hasta 20 metros y produce grandes cantidades de lichis, de 100 a 150 kg. Por año También se cultiva en India , Tailandia, Sudáfrica, Israel, México, Australia y los EE. UU. Es un pariente cercano del longan y el rambután.
Tarjeta de identidad de Lychee
- Familia: Sapindaceae;
- Origen: sur de China;
- Temporada: noviembre a febrero;
- Color: piel rosada, carne blanca;
- Sabor: fragante y dulce.
Una fruta frágil
Lychee no tolera muy bien el frío, el transporte y el tiempo de comercialización. Mide entre 2 y 5 cm y está rodeado por una cáscara delgada y rugosa, que se vuelve rígida después de picar. Sin embargo, tiene la ventaja de ser fácil de pelar. La fruta deja de madurar después de la recolección. Cuando está completamente maduro, la cáscara es roja o rosada. Si la cáscara está empañada o dorada, la fruta es demasiado vieja. La pulpa es blanca, translúcida, jugosa, fragante y muy dulce. El lichi también tiene un núcleo central liso y marrón que no es comestible.
Elegir los lichis adecuados
Los lichis se venden frescos o enlatados. También se pueden encontrar secas o confitadas. En su lugar, elija lichis frescos con una piel coloreada y sin arrugas. Para consumirlo, se retira la cáscara con los dedos o con un cuchillo, cuidando de no cortar la pulpa.
Para una conservación óptima
Los lichis se pueden almacenar en el refrigerador en una bolsa de plástico perforada durante algunas semanas o en el congelador en su caparazón. Si se almacenan a temperatura ambiente, deben consumirse dentro de las 48 horas siguientes, de lo contrario tienden a fermentar y volverse ácidas.
Cómo preparar lichis
El sabor del lichi a menudo se compara con una mezcla de fresa, rosa y moscatel. Este sabor único merece ser explotado en la cocina y es ideal para crear recetas llenas de sabor y originalidad. El lichi también se puede combinar con ingredientes salados y va especialmente bien con pescados, mariscos y carnes blancas.
Algunas ideas para saborear el lichi
El lichi es una fruta sabrosa que necesita poco para mejorar. Aquí hay algunas ideas simples para cocinar lichi en la cocina:
- Crudo, como tentempié o al final de una comida como postre;
- Ensaladas de frutas;
- Enjambres;
- Batidos;
- Cócteles;
- Sorbetes;
- Salsas
- Bromas;
- Acompañamiento de verduras, arroces, pescados y mariscos.
Una fragancia que hace maravillas en la repostería.
Para los pasteleros atrevidos, el lichi es original e inspirador. Su aroma va de maravilla con frambuesas, menta, azahar o incluso rosa, que realzan su sabor sin distorsionarlo. Así, se puede utilizar para hacer postres, mousse de frutas, panna cotta, tiramisus revisitado o incluso refrescantes sopas de frutas. La pulpa carnosa del lichi también es deliciosa incorporada en un pastel, muffin o masa para pastel.
Contraindicaciones y alergias al lichi.
En general, el lichi es excelente para la salud del cuerpo cuando se consume con moderación y como parte de una dieta variada. Sin embargo, en exceso, puede ser responsable de la hiperglucemia, así que tenga cuidado, especialmente en los casos de diabetes. En ciertos sujetos sensibles, el lichi también puede causar problemas digestivos y ser responsable de reacciones alérgicas.
Reacciones alérgicas
El lichi puede ser la causa de reacciones alérgicas en personas susceptibles. Muy a menudo, la alergia al lichi provoca picazón en los labios, el interior de la boca y la garganta poco después de la ingestión. En caso de duda, consulte a un profesional sanitario lo antes posible para evitar complicaciones.
Desordenes digestivos
El lichi promueve el tránsito intestinal debido a su contenido en fibra dietética. Sin embargo, en personas sensibles y / o afectadas por el síndrome del intestino irritable, el consumo de lichi, incluso en pequeñas cantidades, puede provocar síntomas digestivos desagradables: diarrea, hinchazón, dolores de estómago, etc. Por tanto, es necesario adaptar el consumo de alimentos fuente de fibra dietética a la tolerancia digestiva personal.
Historia y anécdotas
Esta fruta se cultiva desde hace más de 2000 años en China, donde la tradición la considera un amuleto de la buena suerte. A veces se le llama la "cereza china".
Una historia muy oscura
En el pasado, el lichi ha sido acusado de ser responsable de la muerte de alrededor de 100 niños en la región de Bihar, en el noroeste de la India. Estos niños, todos los cuales murieron de encefalitis aguda, tenían en común su gran consumo de lichi unas horas antes de su muerte. Aunque todavía circulan muchas hipótesis sobre este extraño hecho, los investigadores parecen haber encontrado la causa de estas letales encefalopatías hipoglucémicas. Se trata de una toxina contenida en el lichi que lleva el nombre de metilen ciclopropil-glicina que habría alterado la glucemia y la oxidación de grasas en estos niños que padecen desnutrición.
En nuestro contexto europeo donde la desnutrición es casi inexistente, afortunadamente no existe riesgo de desarrollar tales síntomas tras la ingestión de lichis. En todos los casos, este consumo debe ser moderado e integrado en una dieta nutritiva y diversificada.