Controle la temperatura ambiente
La temperatura de la habitación de un niño debe ser estable y estar entre 16 y 20 ° C, siendo la buena media en torno a los 18 ° C. El nivel de humedad también es importante: el aire no debe estar demasiado húmedo, ni demasiado seco.
Para tener aire saludable en la habitación del bebé, recuerde ventilarlo regularmente. También puede comprar un humidificador de aire comercial. Algunos de ellos muestran el nivel de humedad para comprobar si el aire está lo suficientemente húmedo.